No hay distancia humilde o lejana,
ninguna barrera en las noches,
diamantes de las musas;
en ellas te tengo cercana.
Ni habrá sueño o magia
que duerma mis manos
con las que besar tus poemas,
o tus labios con ansia.
Siquiera existe lana
que nos engalane con mil ropas:
cien de ellas de tierra,
nuestro lecho, nuestras mantas.
Piensa en esas aguas,
las que separan mundos,
pero no el anillo
cuando en mis olas, te bañas.
© 2020 Elías Enrique Viqueira Lasprilla (Eterno).
España.